¿Qué son las arrugas?
Son surcos de más de 1 mm de profundidad que aparecen en la piel. Forman parte del proceso de envejecimiento cronológico y resultan de una disminución del colágeno responsable del sostenimiento de la piel, que se vuelve menos firme, una disminución de la elastina, con pérdida de elasticidad, disminución del grosor de la piel e incluso movimientos musculares repetidos.
¿Qué tipos de arrugas?
El proceso de aparición de las arrugas es dinámico, apareciendo en diferentes etapas. Se pueden clasificar según el tiempo que permanecen sobre la piel en:
- ARRUGAS DINÁMICAS , características de la piel joven, que aparecen como consecuencia de movimientos repetidos de los músculos faciales, como fruncir el ceño o fruncir el entrecejo, sonreír, parpadear. Aparecen cuando realizas un movimiento o expresión facial y desaparecen cuando la cara vuelve a la normalidad.
Ejemplos de este tipo de arrugas son las arrugas de expresión en la frente y alrededor de los ojos.
- LAS ARRUGAS ESTÁTICAS , que derivan de las dinámicas, son más profundas y definitivas, no desaparecen con el cese de los movimientos de los músculos faciales, permaneciendo en la piel independientemente de estos.
Primero aparecen las ARRUGAS FINAS ESTÁTICAS , como las arrugas del contorno de ojos. Aparecen entre los 20 y los 30 años y están relacionados con la pérdida de colágeno y la exposición solar.
LAS ARRUGAS DE EXPRESIÓN ESTÁTICA aparecen alrededor de los 30 y 40 años, siendo más evidentes a partir de los 50, en general. Algunos ejemplos son “bigote chino”, “patas de gallo” y “código de barras”.
Se producen por la asociación de movimientos de contracción repetidos con cambios en la piel propios del envejecimiento, como la pérdida progresiva de colágeno (disminución del grosor y soporte de la piel) y elastina (disminución de la elasticidad), transformando las arrugas dinámicas en estáticas.
LAS ARRUGAS ESTÁTICAS PROFUNDAS aparecen entre los 40 y 50 años y son evidentes incluso con el rostro en reposo. Dan un aspecto más cansado y demacrado a la cara.
- ARRUGAS POR GRAVEDAD , que, como su nombre indica, tienen que ver con la acción de la gravedad sobre la piel, tirando de ella “hacia abajo” durante años. Este tipo de arruga aparece a partir de los 50 años y se acentúa entre los 60 y 70 años. Se deben a la pérdida de elasticidad y firmeza de la piel, acompañada de un aumento de la flacidez de los músculos faciales, una disminución y reposicionamiento o “caída” de la grasa facial. en algunas zonas del rostro, dejándolo con un aspecto caído. El óvalo de la cara cambia, pareciendo desprenderse con la formación de una papada y una “cara de bulldog”.
Aparecen principalmente en la mandíbula, el mentón y delante de las orejas.
¿Por qué aparecen las arrugas?
Las principales causas de las arrugas, flacidez y cambios en el óvalo del rostro son:
1. Edad/Envejecimiento Cronológico , con:
- Disminución de la firmeza y elasticidad debido a la reducción de la producción de colágeno y elastina,
- Aumento de la sequedad de la piel,
- Cambios en los músculos faciales, con disminución de su soporte.
- Disminución de la grasa facial - con pérdida de volumen, lo que lleva a la aparición del “bigote chino”
- Flacidez de los huesos faciales (resorción ósea) con efectos en el mentón y la mandíbula y surcos alrededor de los ojos.
Además de los factores internos de nuestro organismo, relacionados con el envejecimiento cronológico propio del paso de los años, también existen factores externos. 🇧🇷 Otros dos factores también contribuyen a las arrugas: los rayos infrarrojos y la contaminación.
2. Exposición al sol:
La radiación solar es una de las principales causas del envejecimiento (fotoenvejecimiento), causando arrugas y líneas finas y también puede causar manchas.
Los estudios revelan que el 90% del envejecimiento externo es causado por la radiación ultravioleta del sol, y tiene efectos acumulativos, acelerando la aparición de arrugas.
El resultado final de la combinación de estos factores da como resultado cambios en el óvalo de la cara, que cambia de una forma triangular en la juventud a una forma ovalada con los años y mostrando arrugas.
Si no puedes detener el reloj biológico, puedes, sin embargo, controlar otros factores... sí, somos responsables de parte de nuestras arrugas , cuando:
- bebemos alcohol que deshidrata la piel, aumentando la pérdida de firmeza y deteriorando la calidad del colágeno.
- Comemos alimentos con azúcar , que desencadena la glicación en la piel, es decir, ataca proteínas como el colágeno.
- Fumamos, el humo destruye el colágeno de la piel y perjudica su oxigenación, reduciendo la circulación sanguínea en la piel del cuerpo y la cara. Además, el gesto de fumar favorece la aparición temprana de arrugas alrededor de los ojos y la boca, el famoso “código de barras”.
- Dormimos boca abajo o de costado, lo que provoca un empeoramiento de las arrugas. Si duermes en esta posición, utiliza una funda de almohada de seda o satén para evitarlo.
- Nos olvidamos de usar anteojos de sol y entrecerramos los ojos, empeorando las “patas de gallo” alrededor de los ojos.
La sequedad y la deshidratación también contribuyen a la aparición de arrugas, por lo que debes utilizar agentes hidratantes y humectantes para mantener sana la barrera cutánea.
¡Estén atentos a los próximos artículos para aprender cómo puede prevenir y tratar las arrugas!