¿Sabías que el lubricante es imprescindible durante las relaciones sexuales y aumenta enormemente el placer?
Lubricantes íntimos En los últimos tiempos han dejado de asociarse únicamente a la menopausia y al sexo anal, pasando a ser imprescindibles para muchas personas y parejas.
Sirven para reducir la sequedad vaginal, facilitar la penetración o simplemente añadir una nueva dimensión al placer con nuevas sensaciones olfativas y térmicas.
Ofrecen un amplio abanico de beneficios al reducir la fricción y aumentar la lubricación, y pueden usarse con o sin preservativo, con juguetes sexuales, para alargar la duración de las relaciones sexuales…
Exploremos los diferentes tipos disponibles, sus aplicaciones, beneficios y consejos sobre cómo elegir el lubricante adecuado para usted.
Mitos relacionados con los lubricantes
Mito1
Son para sexo anal y mujeres menopáusicas, es falso, cualquiera puede beneficiarse de su uso, ya sea para reducir la fricción o para aumentar el placer y añadir nuevas sensaciones.
Mito 2
Usar aquellos que no están lo suficientemente excitados es falso, una lubricación insuficiente no es sinónimo de falta de deseo, sino que puede estar simplemente relacionada con factores hormonales, estrés o uso de medicamentos.
Mito 3
Cuanto más lubricado mejor, es falso, hay que utilizar una cantidad suficiente y adecuada y volver a aplicar si es necesario. Hacer que todo esté demasiado resbaladizo puede no ser la mejor opción.
Mito 4
Puedo usar cualquiera. La respuesta correcta: depende de la situación. Los lubricantes a base de agua son compatibles con condones de látex y juguetes de silicona.
Los lubricantes a base de silicona, que son más sedosos y duran más, son ideales para las mucosas que no lubrican de forma natural, como el ano, y para relaciones sexuales más prolongadas.
Mito 5
La saliva se puede usar como lubricante; esto es falso, la saliva no lubrica ni reduce la fricción y no debe usarse para este propósito.
Beneficios de usar lubricantes
Mayor lubricación
En caso de falta de lubricación natural, sexo anal, masturbación.
Retrasar la eyaculación
No es un tratamiento para la eyaculación precoz, pero puede hacer que la fricción sea menos intensa, reducir la hipersensibilidad del glande y reducir la excitación, retrasando la eyección.
Lubricar el condón
Puede ser útil cuando se aplica en el exterior del condón, para aumentar la comodidad de ambos, ya que cuando se usa un condón la fricción aumenta y esta lubricación adicional es bienvenida. También se puede aplicar dentro del condón para reducir las molestias del hombre, pero en este caso solo una gota para evitar el riesgo de que se suelte durante el coito.
Después del embarazo
Como las mujeres suelen experimentar una mayor sequedad vaginal después del embarazo, puede resultar útil utilizar lubricante.
Menopausia
En caso de aumento de la sequedad vaginal, el uso de lubricantes resulta especialmente útil, ya que ayuda a evitar dolores o molestias.
Estimulación y mayor placer
Los lubricantes también se pueden utilizar con fines eróticos, potenciando la estimulación y la fantasía. Tiene efectos aromáticos, fríos y calientes y puede aumentar la libido y facilitar el orgasmo.
¿Qué lubricante elegir?
Básicamente existen dos tipos de lubricantes, los de base agua y los de base silicona.
Los lubricantes a base de agua son los más utilizados porque pueden usarse con condones de látex y juguetes de silicona. Imitan la sensación natural de la vagina, suelen ser bien tolerados y no provocan irritación. No dejan sensación “pegajosa” ni manchan los tejidos. La desventaja es que se absorben más rápidamente, por lo que es necesario reaplicarlos con más frecuencia.
Los lubricantes a base de silicona tienen un tacto más aterciopelado y una duración de acción más prolongada, lo que los hace más adecuados para las membranas mucosas que no lubrican de forma natural, como el ano, o para relaciones sexuales de larga duración. No deben usarse con juguetes de silicona (se pueden usar con juguetes de metal, vidrio o plástico).
Son resistentes al agua y se pueden utilizar en la ducha. No se absorben tan rápido y su efecto dura más. Pueden provocar alergias o irritación y manchar la ropa.
Los lubricantes a base de aceite no son seguros para usar con condones, ya que pueden romperse. Sólo se pueden eliminar con agua y jabón. Son particularmente útiles para su uso en masajes o masturbación.
La vaselina y otros aceites no deben usarse como lubricantes ya que no están formulados específicamente para este propósito y presentan un mayor riesgo de rotura del condón.
¡Elige el que mejor se adapte a tus circunstancias y aquel cuyo olor, textura y “efectos especiales” al usarlo te proporcionen mayor placer!